Los versos de Jorge Eielson me cautivaron por la simplicidad, ingenio, frescura y hermosura, por lo presente y cotidiano de estos, porque uno se identifica de inmediato con alguien que busca ese pequeñito y aun posible lugar, desde donde uno puede vivir y crear libremente poemas, pinturas o esos nudos magistrales, los cuales dicen que se le anunciaron en un sueño.
Ya tendido en la cama uno se queda atrapado con ese magistral relato, con esa devoción en cada fragmento. Escuchar la voz del poeta, una voz ya cansada, un a voz ya menguada por la enfermedad; aun permanesco impasible, atento a cada detalle, disfrutando como siempre lo habia deseado de un corto o alguna pelicula, que te haga perder la nocion del tiempo, que te haga reflexionar sobre la vida que llevamos, que mejor manera de hacerlo que constrastarla con la vida de un poeta, de este poeta. "Vivir es una Obra Maestra" supe luego que se llamaba el corto. 25 minutos dura la magia, apreciar la obra de este poeta, cuya patria no supo valorar y que el mismo afirma cuando se le felicita por la acogida de su obra en una galeria local, el tono de sus palabras, lo honesto y sentidas de estas a uno lo conmueve, percibo ese resentimiento tal vez inconciente con el orden limeño de ese entonces, aunque en seguida creo que mi apreciacón es errada.
La obra de un artista como este trascinde las fronteras de un país, la de un continente, en cualquier rincón del mundo se recordara a alguien que quiso unir las banderas de todos los paises en un solo quipu. Por lo pronto uno ya sabe el final de la historia, se me vienen a la mente algunos poemas suyos que despues de muchos años de ausencia de versos en mi cabeza, fueron los primeros que intente memorizar.A continuación una muestra de su exraordinaria poesía:
Sé perfectamente que mi casa
Es una estrella
Es una estrella
Que se llama vida
Y que esa estrella es la tierra
Y que después tendre otra casa
En otra estrella
Llamada muerte
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